¿Qué son las hormonas?

Muchas veces, cuando le explico a los pacientes la posibilidad de vivir hasta 120 o 150 años pero viéndonos y sintiéndonos como de 75, me voltean a ver con cara de <<no lo dices en serio>> y me rematan con un aún más típico: <<¿75 más de vida?, no gracias?>> y entiendo perfectamente de dónde viene ese <<gracias pero no, gracias>>. En verdad lo sé.

Verán, el ser humano como lo conocemos, no nació para pasarse media o un cuarto de vida pagando una hipoteca, no vino a esta vida para perder 2 a 4 horas diarias en tráfico y estresarse por ello, ni echarle de pestes al gobernante en turno, no nació sin defensas como para que tengamos que ponerle vacunas porque se equivocó la madre naturaleza, no se agota la glándula prozaquinona ni valiumnona y dejan de producir prozaquina o valiumnina de forma que necesitemos Prozac o Valium (antidepresivo y benzodiacepina) para sortear el estrés, depresión, tráfico, miedos y pendientes, porque para empezar no tenemos esa glándula y no deberíamos de tomar antidepresivos o calmantes para sentirnos bien.

Ante la obligada pregunta de; ¿pudieran ser las hormonas?… en una gran cantidad de casos sino es que la mayoría, la respuesta categórica es: sí.

Las hormonas son estos <<arquitectos>> que tenemos en nuestro cuerpo, se encargan de leer los planos que toma del ADN y con ello reconstruye nuestros tejidos una y otra vez, cuantas veces sea necesario.

Está demostrado que nuestro cuerpo se destruye y reconstruye a sí mismo o se renueva en un 90% en un periodo de 3 años, y lo repite una y otra vez, cada 3 años.

¿Qué pasaría si por estrés, ansiedad, depresión y envejecimiento prematuro perdiéramos a la mitad de esos arquitectos u hormonas? Si cada arquitecto está encargado de una edificación en específico y perdemos a la mitad o más, tendríamos a los restantes corriendo de un lado para otro para tratar de coordinar las tareas de remodelación en el: Zócalo/cara, relaciones exteriores/pecho, torre mayor y parque hundido/genitales externos, viaducto y periférico/intestino y circulación.

¿Qué pasaría si además el material para reconstruir no es de calidad?, o sea, las vitaminas, proteína, aminoácidos y minerales/cemento, varilla, bloques, arena y grava. Tendríamos que entonces la labor de reconstruir sería media hecha por el arquitecto o por el albañil sino es que por él media cuchara o el chalan con material de mala calidad y los edificios se vendrían abajo, o sea, aparecerían arrugas, flacidez, caídas de tejidos o disfunción, lo que llamamos: envejecer.

Diríamos cosas terribles, terribles como <<es la gravedad>> cuando quizá la respuesta sería: no, es solo falta de estrógeno, progesterona, testosterona o DHEA.

Está perfectamente demostrado que un ser humano puede vivir hasta 150 años o más con los alimentos adecuados, hidratación óptima, ejercicio, sin estrés, libre de ansiedad, sin depresión y verse en sus 70s como en sus 40s y en los 120s o 150s como en los 70s.

Bastaría con una química sanguínea completa, Biometría hemática, un mineralograma que les hacemos en ASPID, cambio de hábitos, alimentación, células madre obtenidas del plasma rico en plaquetas y otras medidas que les facilitamos en la consulta, para comenzar a reconstruir con planos originales, con hormonas bio idénticas, obtenidas de tu sangre, de tu orina, saliva y de plantas que las producen para tu bienestar, salud  y seguridad.

JAMÁS sintéticas (cuyo origen es de caballo u otro animal), porque tenemos datos contundentes así como estudios que con gusto, podemos compartirles, del riesgo de Cánceres de mama, próstata, cervico uterino, entre otros, los contras son altísimos y … perdón por la comparación pero, si tú eres un VW te gustaría que tus piezas sean de VW, no de Toyota, si eres un BMW, querrás piezas de BMW, no de KIA… imagino.

Dr Carlos Patricio Collado

El Dr Carlos es: Médico Cirujano, especialista en Medicina Hiperbárica y Subacuática. Tiene algunos diplomados, pero le gusta más cómo se ve su foto en el de Bioenergética, dice que es miembro de Asociación Latinoamericana de Ozonoterapia y le creemos. Se admite domador de Vespas y Bicicletas. Le hemos visto como nunca antes, enamorado. Le hace al escritor de a ratos, si le pichas una caguama es tu asesor nutrimental, dícese abandonado a su suerte, pero reconocido promotor del “te amo”. Para ahorrar desodorante se afeita lasaxilas y empareja el pubis, nomás porque se ve bonito, es terco como corredor y maratonista, observador y narrador con y sin drogas, amputador de preconceptos en sus ratos libres y amante correspondido de la medicina integral.

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